Quien eres !!!

domingo, 27 de diciembre de 2009

Invadiendo ese espacio.


Regrese a mi espacio de trabajo, aqui, aqui en la colonia en la cual me inspiro, en donde la ventana de mi cuarto es grande, mas parecida a un ventanal. Observo todo eso que pasa en la vida de los de afuera, mientras mi computadora me ata para que le explique con detalles aquellas vivencias de los otros.

Algunos son felices, otros desgraciados, y otros mas parecen que solo fueran mascaras sobrepuestas en sus rostros lugubres que andan en la fria calle de la noche.

Me siento tan solo, y no es esa soledad que es acojedora, sino que extraño aquello que tanto he amado. Besos y caricias, letras escondidas, pasiones subversivas. Eso extraño, tu calidad de besar en las tardes en las cuales yo jamas hubiera imaginado hacerlo.
Aun me duele, pero que mas da, mientras que, desde el ventanal todo es acojedor, todo es diferente. Como siempre, fugandome en ese realidad alterna y tratando de evitar todo ese remordimiento de culpa, que vuelve cuando mi mente divaga mientras piensa en tus besos magicos.

La Navidad acaba de pasar hace ya tan poco, y la realidad sumisa se esconde detras del espejo de mi sala, ahora estoy inundado en una incognita tan rara.
No tuve a donde ir, y la nevera esta vacia, no cene pavo ni alguna cosa por el estilo y mucho menos abri un regalo.
No me duele, es la 10ma Navidad que pasa asi. Y no es por que yo no tenga fondos economicos, sino que no hay nada que pueda levantar el animo partido de un escritor salitario, que se ha resignado a avanzar sin aquella musa que se ha ido para formar parte de una vida diferente.

Pero veo las cosas claras desde este, mi ventanal del alma, en donde las nubes se difuminan cada vez mas y dejan esos tonos griseceos que tanto me entristecen, y hacen recordar que algun dia estuviste aqui, en este ventanal.

No hace falta reir, no hace falta llorar, no hace falta sonreir, ni mucho menos gritar.
Aqui solo se ha escuchado un ruido seco y rapido que es el anuncio de seguir, de continuar a ese lugar, aun no se donde sera pero se que no sera agradable.

(La mañana del 28 de diciembre se ha descartado la vida presente del autor Frank Mont Blanc.
Ha usado en su contra las armas del diablo y en sus escritos ha dejado un dulce grito de auxilio por no encontrar a esa persona que el tanto ha amado, ahora el se ha entregado al dulce exilio del valle verde en la ribera del panteon frances. Descanse en Paz, Frank Mont Blanc.)

Recortado de la Serie: Frank Mont Blanc y el ventanal de mi alma.

lunes, 21 de diciembre de 2009

Sí lo sé.

En verdad lo se, eso que ahora hace que esta tarde este cubierta de tanta melancolia, recordando cada frase salir de tu boca, cada aire nuevo que ofrecias como influencia para mi arte. Lo se, se que te has ido y que con tu ausencia la tarde ha caido, mi alma pesada vuelve al cajon de donde la saque al otro dia de haberte conocido.
Aun la tarde sigue en el punto donde es de color gris, en donde es el punto de ebullicion de la tristeza que se anuncia, y que ha llegado a colmar mis tardes como esta.

Aun lo sigo sabiendo, eso que me hacia volverme loco entre caricias que con el aire se envolvian, pasiones que se descubrian, un buen elemento entre los sones que se dividian.

Te extraño, esa es la verdad, y aun cuando sepa todo lo que se, has sido para mi esa pieza clave en el desarrollo en el que me encantaba abundarme e inundarme.

Lo se, la tarde ha creado ese aire sublime que me hace inspirarme, es delicado saberlo, pero al saberlo la tarde se ha comido mi gran alegria por saber un dia mas que la vida es preciosa, y que esta guardandose para mi en un capullo de inmensidades.

Ahora mi amor se ha vuelto a encerrar en aquel mundo en el que aun se piensa que puede ser rosa, un color en el cual algunas personas aun seguimos viviendo.

Recortado de la serie: Frank Mont Blanc y las tardes grises.

Ojala les guste.

in memoriam.


domingo, 13 de diciembre de 2009

La huida.

Pasan de las 5, mi alma está en estado vegetativo y la luz casi no entra en esta habitación.
Laura no ha llegado, se fue hace dos días de este lugar.
Se fue gritando y en un enojo grande, con sus cosas en su maleta y su alma destrozada, pareciera que yo he tenido la culpa, como siempre.
He fumado toda la tarde estos cigarrillos, te extraño un poco, mas no te necesito tanto como debiera, tal vez alguien te trate mejor que yo.
Hace 2 noches atrás, ella nos encontró a Ashley y a mí en pleno acto sexual, su reacción fue golpear a la chica que tenia encima mío, a mi no me hizo nada, solo hablo conmigo después de correr de la habitación a Ashley, yo le dije lo que a Laura le gusto escuchar.

Tengo 25 años, tengo departamento en una zona alegre de la bella España, después de permanecer varios meses encerrado en un lugar de México en donde aliviaban las adicciones.
Me escape del cuidado de mis padres a los 21 al trabajar un año sin parar.
Ahorre buen dinero y me fui sin decir nada, ahora las amistades cercanas me han dicho que mis padres siguen buscándome furtivamente.
Ahora visto a la moda, tengo auto y una buena cuenta en el banco central español.
Me dedique a la cocina y soy un chef reconocido, tome esa lección de una chica mexicana exitosa en el mismo rubro, su nombre no lo recuerdo.
Las chicas me miran y me piden mi teléfono casi siempre en cada evento.
Conocí a Laura en el museo de Louvre en Paris, una tarde lluviosa, mi instinto aventurero me llevo a conocer algunos países europeos.
Por suerte ella era española y vivía cerca de mi lugar de residencia, con su cara afilada cautivo mi estadía en el museo más solicitado en Paris.
Paseamos toda la tarde después de la lluvia atosigadora, comimos helados y robe un beso de su encantadora boca, que mientras miraba, arrancaba suspiros.
Ya en la noche deje las platicas y la deje en su hotel, donde pasaba la noche mientras vivía en parís, un poco alejado del mío.
Ella me dijo que si quería pasar una noche con ella, yo no acepte y me retire, no sin antes pedir una cita al otro día con ella.

Pasó el tiempo y con él, se fue desarrollando el amor hacia Laura, cada día era una nueva oportunidad para conocerla a fondo. Después de 2 años de dulce noviazgo ella se fue a vivir conmigo, todo era como yo siempre había deseado, casa bonita, lo necesario para vivir y una linda chica con la cual vivir emociones nuevas.
Tiempo después la rutina me llevo al aburrimiento, las emociones se volvieron tediosas y mi deseo por Laura iba desapareciendo poco a poco. Mi trabajo absorbía mi tiempo, pero eso no hacia faltar a casa, ella siempre esperaba en la sala hasta que yo llegaba, varias noches la fiesta atrapaba mi sentir, ella no era invitada, las chicas aceptaban mi cuerpo y en ocasiones no acudía a mi casa por las noches, Laura sospechaba, pero cegada por el amor hacia mí, no había reclamos.

Varias veces trate de volver a retomar mi amor por ella, el libertinaje había descompensado el equilibrio en casa.
Pasaba el tiempo y antes de la ocasión de Ashley había mantenido relaciones con Laura, había empezado a sentir eso que sentí la primera vez.

Me siento solo, la casa vacía y mí a la par, sintiendo cada noche en mi cama matrimonial el frio nocturno.

Hoy no me levante a trabajar, estoy en bóxer y no tengo apetito, siendo que puedo crear deliciosos platillos que en la academia española aprendí. Extraño mi hogar mexicano, deseo mostrar lo que he aprendido a mi familia y hasta deseaba llevar alguna vez llevar a Laura a presentarla a mi madre.

Laura siempre deseaba tener un hijo, pero a mí me daba miedo, aunque supiera que mi nivel económico me lo permitía. Recuerdo tantas cosas de México, todo aquello que olvide, a la chef que tanto amé y que hui amando, para escapar de su no compromiso, con mi edad 20 añera y mis sueños que en España he cumplido, semejantes cosas que en México nunca logre, una fuga emocional, material y de sentimiento.
Aun recuerdo esas tardes hermosas en donde ella no era Laura, en donde mi chef hacia que mi mundo cambiara de muchas formas.

Sigo en mi recamara pensando, viendo el espejo y me observo, he cambiado físicamente, mi cuerpo vistoso me alegra y mi cabello largo recortado a la moda española. Jamás dije que era mexicano, pero las personas notaban mi acento peculiar, y mis tradiciones que poco a poco olvide.

Se escucha la puerta, escucho pasos y salgo en la búsqueda de Laura, añorando encontrarla.
La veo, está en la puerta, la noto mas rara y con un aire emocionado al verme a los ojos, al notar lo aceitunado de los de ella, me acerco y le digo que la amo, ella acepta mis palabras y me recibe con un beso.
Ya sentados en la sala ella me dice que está embarazada, que desea tener una vida sin engaños, sin malos tratos y lejos de este lugar.

Me quedo helado, en un momento no se qué decir.
Me beso, mi alma se enciende y recupero mi conciencia, me miro como padre, mientras los pensamientos me invaden y tú me observas fijamente, con una cara aterrada esperando un grito o una mala respuesta.

Volteo y te miro y te ofrezco mi palabra más sincera:
<<>>

Han pasado ocho meses, tu vientre se ha inflado mucho, me inunda la idea de ser feliz con este ser nuevo que inundara la casa de sonrisas y alegrías.
Sigo trabajando, en los eventos aun me siguen pidiendo mi numero, pero ahora ya no lo doy, ya no acudo a los lugares de fiesta, en vez de eso cumplo todos los gustos de mi Laura embarazada.

El viernes 7 de diciembre, una enfermera llama a mi móvil, me anuncia que un varón acaba de nacer, se me escurren las lagrimas y pregunto la dirección del hospital; al lugar que tengo acudir es la Alianza Española de servicios médicos.
Ya ahí me alegra ver a la linda Laura con mi hijo en los brazos, la beso y me encuentro con Jean Françoise, el nombre que he decidido darle, y también con la alegría que ha nacido el mismo día en el que cumplo 26 años.

Ha pasado el tiempo, el niño aun sigue en brazos y Laura es más hermosa que antes; he vendido la casa, el coche, y he sacado todo mi dinero del central Español, compre 2 boletos en Lufthansa para regresar a México en 2 días, he aprovechado todo este acontecimiento para que Françoise
sea México-Español, Laura acepto vivir un tiempo en México.

Nos hemos despedido de la familia de Laura y de las amistades más cercanas, de la señora Martiné de la tienda de víveres, del carnicero Yves y en especial de la bella España que un día me acogió en su sutileza Europea.

Llegamos a México el 20 de diciembre, subimos a un taxi y observo la ciudad, aun mas cambiada, recuerdo todas esas zonas y recuerdo toda esa comida que era deliciosa.
Pido al taxista que me lleve a la residencia donde algún día viví con mis padres, bueno con mi madre. El trafico está tranquilo, y llego en una hora hacia esa casa; ha cambiado la fachada, y los portones, las calles del fraccionamiento son más vistosas ahora, los sentidos de las avenidas han cambiado, y nueva gente ha poblado.
Pago el taxi y bajo el equipaje, traigo tantas cosas, recuerdos, ropa, víveres que en México no hay.
Toco la puerta, nadie acude, recuerdo que aún conservo las llaves que algún día no tire, las saco y pruebo, la puerta se abre al girar la llave, entro, pero ya no veo a la linda perra blanca que algún día vivió en ese hogar.
Camino a la segunda puerta e inserto la siguiente llave, se vuelve a abrir la puerta, observo los interiores de la casa, todo ha cambiado, ahora ya no es la casa en la que algún día residí.

Laura se mete conmigo y dejo todo el equipaje en la sala, subo las escaleras y busco a mama, no la encuentro en ningún lado, no se cuáles son sus números de teléfono.
Me pongo cómodo e invito a Laura a sentirse igual que en casa.
Pasa 1 y 2 horas hasta que se abre la puerta y me encuentro frente a frente a mi madre, al observarme se le ruedan las lágrimas, observa con curiosidad mi cara y mi cuerpo, me lo demuestra con una cara de sorpresa combinada con emoción, asimismo observa a Laura y al niño envuelto en sus cobertores.
Me presento ante ella y le digo que el tiempo ha cambiado las cosas, que mi enfermedad no desapareció pero ahora esta pausado ese demonio, que encontré una carrera en la cual me dedique y que logre mucho de lo que tuve en España, le digo que hui a ese lugar por terror a otro encierro y a repetir los viejos moldes, le digo que encontré a una esposa que no valore pero al darme cuenta de que tenía ese valor reaccione. Le presento a su nieto, Jean Françoise , ella se emociona y pregunta a Laura que si puede cargarlo, antes de eso observa a Laura y la abraza, nota su color de piel y sus ojos aceitunados, apremia su hermosura y nos invita sentarnos;
observa al niño y lo besa y se siente tan bien.
Le comento que antes de huir de México viví una semana en Cancún antes de abordar un bote pesquero en el cual deje todo sueño en México para así empezar una nueva vida en España, en aquel viejo continente en donde la soledad me inundo y donde lo primero que hice fue dormir con amistades en sus casa, discutí todas esas cosas que tuve que hacer para generar dinero para estudiar gastronomía española en el colegio nacional español al lado de chefs de alta alcurnia y de todo lo que sufrí para salir adelante.
Ella escucha atenta, y dice que me había buscado en muchos lugares, pensó que estaba muerto, pero que jamás dejo de buscarme, todas las noches al encontrar a mis compañeros de adicción ella preguntaba sobre mí, (lo que ella nunca supo fue que a nadie dije lo que iba a hacer).
Sus ojos tenían el brillo del que recuerdo cuando ella era joven y yo solo un niño.
Dejo a Françoise en los brazos de Laura, se acerco a mí y me exploro la cara, me beso en las mejillas y yo conteste a sus caricias plenas.

Ahora he encontrado una nueva vida aquí en México, en donde todo es familiar, pero aun sigo extrañando a la bella España, ojala algún día regrese a seguir disfrutando esa vida.
Con respecto a Laura, ella vive tranquila en este lugar, a aprendido tantas cosas y a cocinar tan delicioso; el niño ya camina y es un demonio en la casa, se parece tanto a mí y ya me dice papa, es una ternura observar cómo crece.
Yo trabajo en una cadena de hoteles haciendo de comer para los altos empresarios que acuden a sus eventos.
Volví a encontrar a la chef Mexicana a la que tanto ame, lo único que pude hablar con ella solo fue de ingredientes que debía de combinar, solo eso, se volvió fría y jamás quiso saber nada mas de mi.
Aun le extraño, lástima que ella ahora sea 11 años mayor que yo, aun así no le quito el encanto que siempre había tenido y ese que me cautivo.

Recortado de la serie Frank Mont Blanc: La historia ficticia de alguna persona, recortada y pegada en cachitos.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Cerrando un ciclo.


Describiendo eso, con mi inspiracion.

Te dejo al olvido, preciosa expresion de dulzura que encontre en un salon de clases, y te dejo ahi por que es con lo unico a lo que te puedo entregar, como un padre deja a su hija en el altar para recibir esas bendiciones de un extraño que es subdito de dios.

Te dejo aunque me duela en una manera sublime, pero lo hago, jamas pense hacerlo de este modo, ni usar tu sonrisa de esta foto para darme un final feliz, aunque asi mas lo haya deseado.
Comienza una nueva faceta, esa en la cual ya no estaras y tus besos no dejaras regados en la sala ni en la cama matrimonial.
Aunque jamas olvidare aquellos detalles que me movieron a escribir cosas lindas, como ese sillon de color de las fresas, o aquellos zapatos que algun dia compramos, o aquellas platicas a altas horas de la noche en donde dejabas tu practica de pedagogia, o tal vez esos besos que alguna vez desee guardar en un frasco de mayonesa sin la etiqueta y recien lavado.
Jamas lo olvidare, jamas.
Las paletas de mango con chamoy, los lugares recorridos, las hamburguesas, las papas a la francesa, el cheesecake o mejor llamado uno de esos.
Ojala el olvido te trate mejor que yo, ojala el sea mas explicito y tan lindo, que sea explosivo y que te haga reir con sus cosas, ojala que puedas acariciar el cabello de aquel olvido al cual te entrego, esta noche.

Cerrando un ciclo, el ciclo de hablar de ti, el ciclo de pensar en ti, todo eso es olvido, todo esto tiene que acabar, por que acabando sera mejor.
Ahora tendras que volverte madre y tendras que caminar hacia ese altar que tanto odiaste, y tendras que entregarte a la vida que repudiaste, a esa donde la camioneta sera tu amiga fiel y las madres de los demas niños seran tus amigas, para decir a cada dia despues de dejar a tus hijos afuera del kindergartden que las bolsas de basura han subido 3 pesos.
Ahora tu idea del cafe del starbucks se ira y encontraras placeres mas efimeros como hacer tareas por las tardes mientras tus niños pidan el chocomilk de las 5 para despues sentarse a ver la caja idiota por mil horas, y solo los observaras como creceran.

Te entregaras a la vejez que note el otro dia en tu rostro, esa que empieza a carcomerte por fuera. Me dio tanta tristeza ver ese episodio, y yo que queria ser para ti.
Pero ahora todo eso me da alegria, alegria de ver como un ciclo se ha cerrado otra vez.

Escucho musica clasica y veo pasar tu vida en un 2x3 como cuando la mia se solia destrozar, te veo entregada a eso a lo que le rehuias, a la vida con una persona diferente a mi, aquella en la que los celos carcomeran toda tu idea acerca de ti. Pensar que tiene celos de mi, yo un simple chamaco de 21 años, ahora imagina cuando llegue el cartero o el lechero, que pensara el.

No te olvidare ni mañana ni pasado, ni dentro de 8 dias, pero se que algun dia se acabara todo esto, esto que no me ha dejado pasar a otro plano, otro plano en mi existencia de la cual me siento feliz, por haber superado una dificil prueba, ya sabes cual no?.
Si no la sabes te la digo, por que es sano enfrentar lo que fui, y esa prueba fue haber dejado mi dependencia por los quimicos, esa afeccion a las drogas que hicieron que yo haya perdido todo, hasta a ti.

Te doy gracias por haberme hecho recorrer un camino tan doloroso, pero a la vez tan satisfactorio, por que comienza una nueva vida, por que no he cumplido 21 años, sino apenas 4 meses con vida, por que lo demas se ha quedado atras, se quedo atras por ser una vida de mascaras con las cuales andaba por las calles, pavoneandome por creer que era joven.
En ese camino encontre la dulzura de mi ser y la felicidad de saber que ahora no puedo mentir, de saber que los golpes verdaderos son en esta vida, afuera de todo mundo alterno en el cual se pueda vivir, afuera del viaje en el que estaba atrapado, en el viaje de tim leary, en el viaje del Lsd, de la mezcalina, del de el peyote magico y de todos otros muchos que he conocido.

A ti gracias por ser esa compañera mistica, esa que me guio por muchos lugares remotos a mi, te agradezco, ojala puedas enseñar a tus hijos de esa manera tan especial como en la que lo hacias para mi.

Se que no soy un gran escritor, ni una persona adinerada, ni una persona valiosa, pero aun asi te di todo mi amor, todo ese amor que pude dar, ese que jamas habia liberado, ese que no quisiste.

Adios muñeca, adios Nancy, en verdad fue algo hermoso, que jamas olvidare, pero quedara guardado en este corazon de un escritor solitario, de un escritor fantastico, y sacado de un cuento de hadas.

Gracias.

Recortado de la serie: Frank Mont Blanc y las despedidas por la puerta grande, mi alma.

lunes, 7 de diciembre de 2009

…Y serás mi regalo perfecto.

Hola, hoy es el dia en que culmino este trabajo, el dia de mi cumple, ahora soy mas viejo y me doy mas cuenta de las mismas cosas, en verdad creo que naci solo y asi tendre que morir, por eso hoy consumire toda clase de azucares y grasas para ser feliz en mi dia, asi como buscar la tecnologia que mas pueda gustarme, pero hubo una persona que no tuvo que recurrir a esto, sino solo envio una carta, una carta en la que demostraba todo su cariño hacia mi.
Gracias flor por tu carta, alegraste mi dia.


Cuando no se tiene nada que escribir, la mejor manera de expresar un sentimiento es viéndolo desde afuera…


Pasé toda la madrugada desvelada. A pesar de saber que es propio de mi naturaleza ser una especie de murciélago que duerme de día y sale de noche a vivir su vida, esta vez los motivos eran más que suficientes para mantenerme en vela hasta que consiguiera resolver mi acertijo. Estaba debatiéndome cuál sería el mejor regalo que alguien espera recibir, sobre todo alguien a quien se le tiene mucho afecto y espera con muchas ansias que sea feliz. Quizás una tarjeta, simple pero con las palabras justas de un corazón alegre, o algo realmente costoso, que haga evidencia del valor auténtico de esa persona, u obsequiar alguna cosa que el festejado deseara con todas sus fuerzas. En fin, nunca conseguí decidirme.
Y, ahí me veía a mí misma, perdida en sueños. Despierta, pero demasiado cansada para aceptarlo. Cada pedacito de sueño que volaba dentro de mi mente no era más que el comienzo de otros mucho más convincentes que el primero. Aquellos sueños comenzaron a jugar a las escondidas en mi confusa psique, hasta que empezaron a abrirse unos a unos, en cadena. A penas aparecía alguno nuevo, brotaba de la nada otro completamente extravagante, y así, sucesivamente, se formó una revolución mental en la que sólo yo era la dueña de sus destinos y de mi decisión.
Lo extraño de todo esto es que siempre existió un hilo conductor, un talismán de salvación, que prometía redimirme de tanta confusión. Él era un hombre. Lo designé “mi personaje” debido a que si alguna vez tuviera que elegir escribir sobre alguien, absolutamente lo elegiría a él. Era tan sólo su imagen producto de mi imaginación, pero su esencia era más perdurable y real que la de cualquier actor de novela clásica que hubiera leído. Era auténtico, único en lo que respecta a caballeros de novela.
Quién sabe que habrá pasado por la cabeza de este singular personaje. Sin embargo, me llamó la atención que lo que más resaltaba de su dulce imagen era su rostro empalidecido, quizás aún más confundido que el mío. Esa ilusión me provocó miedo. No miedo de ese que está firmemente convencido de que te hará sufrir infinitamente, sino miedo de su después. Jamás permitiría que un personaje, mejor dicho, que mi personaje, sufriera. Y menos, que su destino fuera como sus tristes ojos reflejaban. Así que me convencí a mí misma que lo mejor sería darle vida a su propia existencia.
¿Qué clase de historia elegiría para mi personaje?, ¿una de amor o una de desencanto?, ¿una de aventuras o una de terror? Esta última palabra retomó mi miedo del principio y a la imagen viva, que era aún más dolorosa verla de lejos que sentirla en carne propia, de su rostro encrespado. Simplemente me permití poner todas mis cartas en él y crear una historia en la que sólo él y nada más que él fuera el héroe y darle todos los lujos que la clase de personajes como él merecía. Sería la combinación exacta en la que mi queridísimo caballero viviría feliz por siempre.
Finalmente, cuando logré, al fin, decidirme por mi personaje, por el regalo perfecto, por su historia, etc., todo se desvaneció en mil pedazos. Casi siempre “desvanecerse” es un mal presagio, pero en este caso fue todo lo contrario: había resuelto mi acertijo y mis sueños ya no eran sueños, sino resoluciones y mucha seguridad en que el mejor regalo que esperaba obsequiarle a ese amigo, a esa persona especial que tenía en mente desde siempre, estaba totalmente resuelto.
Él, esa era mi respuesta, el regalo perfecto…

Amigo: feliz cumpleaños, como ya debes saber, si alguna vez eligiera escribir sobre alguien, te elegiría absolutamente. No quiero verte triste y menos pensar que sufres por tu pasado y los recuerdos. Mi regalo es esta visión de ti mismo. Para que sepas que vales mucho, eres oro y si me tocara, alguna vez, inventarte una historia, me decidiría por todas y en todas ellas serías el héroe.
Un beso y muchas felicidades.

sábado, 5 de diciembre de 2009

Cristales rotos

Hola !!!
Este es otro escrito de esos que jamás publicaría, pero por motivo de mi cumpleaños he aquí para todos ustedes, este es mi regalo para ustedes, ojala les guste.


Mi padre y mi madre, figuras a seguir, hoy no los he visto, mas los llamo con mi mente, y rezo al poder más espiritual para que me saquen de este pedazo de existencia en donde la vida no es vida.

Los pasillos son largos, en este lugar; tengo 10 años aun no tengo un solo amigo, no me da tristeza pero desearía mas que nada encontrar uno.
Aurora la maestra de filosofía me ha dicho que el miedo solo es un síntoma, que lo olvide y que siga adelante, que me dirija como los caballos con sus parches en los ojos, que no permiten ver a los lados.
Aun lo siento, los pasillos de esta institución son largos, los recorro por las noches, me gusta observarlos mientras la luna deja su brillo sobre ellos, es pacifico ver estas escenas, mientras mis verdugos duermen en sus alcobas, alcanzando el sueño profundo de ese que alucinan todo el día después de muchas horas de clases, en donde los maestros se alimentan de nuestro llanto a causa de la propinación de los golpes de la regla, o del borrador lleno de tiza.
Me han dicho que algún día mis padres volverán de su viaje lejano en el que se encuentran.
Los días aquí pasan lentamente, entre enseñanzas sobre materias que me importan un bledo pero en las cuales mi intelecto se desborda.

Tere me da a escondidas leche con pan; todo sucedió una noche parecida a esta, mientras observaba la luna embelesado, pidiéndole el regreso de mis padres. Ella me encontró mirándola, dejando mis plegarias en su poder de luz provocado por el reflejo del sol, que da vida al gran queso.
Me asusto al tocar mi hombreo, no grite por respeto al silencio precioso que reinaba el pasillo frio, me dijo que la siguiera, me condujo a las cocinas, nunca había visto tal elegancia en una cocina del tamaño de dos dormitorios, me dijo que no hiciera ruido, que en vez de eso comiera tranquilo.
Después de esa escena se volvió mi ángel, y en cada comida de las tres diarias aliviaba mi hambre regalando siempre un poco más.
Aquí no penetran los periódicos, no hay tele, ni juegos, el estudio está presente casi todo el día, me fugo en ello, desde la muralla china hasta las pirámides de Egipto y la belleza imponente de la arquitectura japonesa. No puedo permitirme la tristeza, desearía ser como Carlos, inventando cada tontería de su mente, o como Priscila que ama la religión de una forma enfermiza.
Desde mi infancia estoy aquí, bueno digo desde que yo recuerdo, en esos tonos blancuzcos.

La directora dice que tengo intelecto, ha revisado alguno de mis escritos donde narro los sentimientos de mi corta vida. Le he dicho que deseo tocar el piano y que me gustaría sentir las teclas de marfil del piano que hay en una sala de la escuela, siempre tapado en su funda, cubriendo sus letras de oro del polvo. Ella ha aceptado ahora todo es cuestión de tiempo, hasta que consigan un maestro para dedicarme un poco de su majestuosidad frente al cajón que tiene dientes y armonía en su sonido.

El lunes a una hora antes de la clase de botánica, la directora me llamo, su voz autoritaria sonó en la bocina de mi salón, dando mi nombre.
Acudí al llamado a su oficina, al entrar había una presencia nueva, era algo emocionante.
La directora me presento ante la profesora de piano, era hermosa; tenia ojos color madera, cabello del color combinado entre rojizo con amarillo, ni muy marcado ni muy opaco, un cuerpo esbelto y con dentadura perfecta y una sonrisa marcada.
Su nombre Nancy, estaba embelesado y mi mirada se había perdido en su presencia, la directora me dijo que sería mi nueva profesora, me enseñaría todos los días 2 horas de clase, intercalando entre cada día, teoría y práctica.
Después de la rutina de presentarnos y decirle algo vano de mi persona salí de la oficina y regrese a mi clase, en la cual la maestra Dorotea había comenzado a detallar información acerca de plantas medicinales. La prefecta Martha después de las horas de clases, nos llevo a los dormitorios.
Espere a que ninguna voz se escuchara en los pasillos, salí a hurtadillas a mi lugar preferido en donde el ventanal dejaba admirar la luna colosal, una vez más me acerque a aquel gran mural de vidrio, estaba contemplando la luna cuando detrás de mi escuche esa voz dulce que toda la tarde desee escuchar, era la profesora Nancy diciendo en voz baja: La luna a la que miras, especial inspirante en un corazón artista, disfrútala por que no siempre se aprecia así.
Voltee y mire sus ojos, sentí el ángel que había inundado el pasillo.
Esa noche la maestra charlo conmigo y comento acerca de música excelsa que tenia inquietud de enseñarme.

II
La profesora Nancy.

Con estudios en Alemania, Polonia, Japón, España y demás países con gran reconocimiento en el ámbito pianístico, desde pequeña su gran intelecto se denotaba, y dedico su vida entera a perfeccionar las obras de Chopin, Bach, Beethoven etc.
Logro tocar en auditorios de los países que mencione en párrafos anteriores, y su familia estaba orgullosa de eso. Jamás había sentido alguna clase de emoción de amor hacia nadie de su clase, ningún pianista había llamado su atención.
Con 27 años, sonrisa a temple con su alma y manos de seda que se movían rápidamente al expresar su sentimiento frente al piano.
Fue llamada desde su residencia en Boston para entrenar a un niño prodigio de una escuela, más bien un internado, la paga ofrecida había sido llamativa, por el hecho de que solo era un alumno por enseñar.
La maestra tuvo curiosidad por el alumno y antes de aceptar pidió un amplio historial; en aquel escrito redactado todo el historial era pulcro:

Nombre: Frank Mont Blanc
Actitud: Excelente
Desarrollo académico:
Un alumno sin mancha de faltas, excelso en escritura. Sus calificaciones han sido mantenidas a lo largo de su carrera en este instituto.
Sin más ni más ofrezco el puesto para que al chico se le inculque una pulcra enseñanza en el ámbito musical; El ha mencionado su interés en el piano, ojala con su experiencia y sin afectar su tiempo, pueda usted ayudarnos a formar el intelecto que puede brillar aun mas en este chico.

Atte.: Srita Scope.
Por su atención gracias.

La maestra tuvo interés con este alumno y de inmediato se puso en contacto con el instituto.

III

La primera clase.

El miércoles después de la clase de aritmética con el profesor Javier, volvió a repicar la bocina de mi salón anunciando mi nombre. Asistí al salón donde el piano ya no estaba cubierto, en el banquillo se encontraba la maestra, me dijo que me sentara y pusiera atención.
Comenzó a tocar algo demasiado triste, cerré los ojos y recordé el ventanal y la luna llena, imagine la soledad entera de mi vida y comencé a llorar en silencio.
La música se desarrollaba y la maestra cada vez invocaba las notas. Al terminar la pieza, al dejar sus manos en sus piernas, noto como yo lloraba, sabía perfectamente el sentimiento que había invocado con esa pieza tan melancólica.
Comenzó a enseñarme las notas en el pizarrón de la sala, dibujo un pentagrama y me dijo algo acerca de la clase de las notas musicales, así mismo explicando las teclas; desde las teclas centrales. Yo la miraba y tomaba nota mental y escrita de todas sus enseñanzas. Desde el movimiento de sus manos con la tiza y su movimiento de sus labios carnosos que hubiera querido en ese momento besar, lástima que hubiera sido tan pequeño aun.
Después de una media hora irrumpió a preguntar cosas acerca de mi vida, yo por el respeto y sencillez permanecía callado, después contestando a lo que ella preguntaba.
Primero ataco mi ser con preguntas acerca de mis padres, contestando que se encontraban lejos, en un viaje del que yo no sabía nada, pude decirle que me dedicaba en las materias de la escuela para distraer mi pensamiento en ellos. Después pregunto que si alguna de las chicas de la escuela me agradaba, obviamente nadie me atraía, solo la nueva imagen de ella como mi maestra de piano, negué todo acerca de las chicas.
Siguió explicando tecnicismos de la practica al tocar, pidió mis manos para tocarlas, primero la derecha, después la izquierda, observo que tenía las manos largas, lo afirmo con una sonrisa en su cara.
Empezó a acercarme al piano con juegos de combinaciones de teclas a tocar, para agilizar mis dedos dormidos.
Creo que las dos horas pasaron rápidamente, creo que también fue el día más feliz del mundo.

IV
Felicidad Encontrada.

Al acabar la clase fui a mi cuarto, una estela de felicidad inundo mi pensamiento y sensación de alma. Comencé a utilizar mi intelecto para formular un escrito donde depositaba todas esas sensaciones que había desaparecido fervientemente con una sutileza magnificadora.
Esa misma noche ataque el pasillo de la escuela, con su piso brilloso y su esencia peculiar, en ese pasillo la luna daba su espectáculo vibrante, una obra de brillantez que se alcanzaba a causa de la luna llena; Ella sabía que estaría ahí, puntual al unisonó de los ronquidos infantiles de aquel cuarto frio y lúgubre en el cual yo cocinaba mis sentimientos en mis cuadernos de bajo costo. Mientras observaba el ventanal y la luna a través de él, alucinado por su gran brillantez ella toco mi hombro como antes lo había hecho. Casi no hablamos solo observamos aquel brillo con el cual esa gran luna nos robaba el alma y hacia dejar marcadas nuestras vidas de artistas del alma. Después de una hora ella me dijo que era el momento de volver a los aposentos, al indicárnoslo el repique del reloj que dictaba las horas, abajo en la gran sala donde en algunas ocasiones podíamos estar los fines de semana, dio 12 repiques indicando la hora que indicaba ese dueño del tiempo.

Ojala les guste, es algo más de lo que escribí en un tiempo donde creí que ella volvería conmigo, ahora eso es imposible, ahora ella será feliz y eso me da gusto, creo que no hay nada más que decir ni escribir acerca de ella, ha dejado tan claro esa idea de no volver a su lado. Me evitare escribir otros muchos de los escritos en los cuales hablo de Nancy, la persona que ha dejado marcada mi vida, para así entregarme al olvido.
Para que escribir mas si ya no podrá creer que la amo, si ahora esta entregada a una persona diferente.
No puedo encontrar la cura de este amor, y tampoco puedo enamorarme de nadie, es difícil pero es verdad, la ame como loco. Por eso ahora este será lo último, gracias a todos y ojala les guste ya que volveré por aquí otra vez, algún día que pueda conseguir algo más que relatarles.
Me he dado por vencido. Engordare, fumare como loco y me moriré de alguna forma sutil para dejar un cuerpo joven emancipado por el sobrepeso y mi amor muerto. Gracias.

Atte.: Frank Mont Blanc & Eder Cravioto.

Recortado de la serie: Frank Mont Blanc y el recuerdo de Nancy.

viernes, 4 de diciembre de 2009

La historia del café.

Preciosa nublada, te olvido cada día, una vez más, sin mentiras, con ese ruido en la garganta, pero con todas mis fuerzas.

I

Me lo encontré en un café de la ciudad, para ser exactos en el centro, leyendo un libro en latín, con sus lentes ajustados y a la moda, bebiendo un te rojo, con su cigarrillo en la boca y la posición de sus dedos en su libro, como todas las tardes después del colegio. Entre precipitadamente en el lugar y me acerque a la mesa, no había nadie más, su soledad aun era la que había conocido hace ya mucho, su cara aun seguí siendo fresca, y su loción era de lo más atractiva, bien vestido y tan tranquilo, me acerqué y le toque el hombro; no me recordó, que dolor, me pregunto mi nombre y al decirle cual era me recordó.

Sus ojos brillaron de esa manera como cuando tenía 20 años; no lo había visto hace ya tanto tiempo, después de esa desaparición que él tuvo y que me dejo sola, diciendo que siempre había mentido. Había leído algo de él, de su autoría en algunos periódicos de la ciudad, solo letras que adornaban su ego crecido, pero no lo había visto en persona.

Ahora tengo 40 años, ahora recuerdo su deseo infinito de hacerme su esposa y tener hijos, de regalar esa juventud que sigue luciendo en esta mesa en donde lo volví a encontrar.

Trate de hablar, pero me interrumpió, pregunto algo acerca de la metamorfosis, no supe que contestar, el dijo: La metamorfosis, parte importante de un crecimiento, cambio de aspecto y forma de vida.

II

Al escuchar sus palabras recordé aquella forma en que me aleje de él, ocultando mis sentimientos que mi ego no permitía mostrarle, el era joven, pensé que podía frenar su crecimiento, pero era lo que el necesitaba, para situar su mente al peso de una responsabilidad diferente; muchas veces disfrute su comportamiento, pero era más fuerte mi ego.

Su manera de mentir me irritaba, su deseo por las drogas y su anorexia que demostraba era algo que deteste, aun así lo quise demasiado.

Me arrepiento ahora, lo observo tan bien, sus ojos brillosos y su cabello largo, su ropa que huele a una mezcla rara de hierbas orientales, en si es algo que jamás hubiera creído; El no había podido en años anteriores tener ese porte, sus ojos habían perdido el brillo, y su elocuencia también.

En el lugar donde nos encontramos ahora, en este café, donde el humo del cigarro adorna el ambiente, mientras consume a los no fumadores, el no ha reclamado nada, como era de costumbre.

Se alejo de mi después de aquel mensaje que deposite en su número celular, no volvió a buscarme ni a llamarme, en mi correo electrónico no volvió a aparecer, su distancia marco el momento de olvidarse de mí, ahora después de tanto tiempo no lo culpo, tuvo razón de alejarse, el me amaba en una forma loca y entregaba todo su ser.

III

Lo recordaba en muchas ocasiones, cuando el jazz volvía en recuerdos, cuando las tardes de café con alguna persona no me parecían tan agradables. Su alegría se esfumo de mi vida monótona, su calentura me recorría el cuerpo, en si él era tan diferente, en si no puedo olvidarlo, pues él era una idea demasiado alejada de la mía.

Mientras estoy de frente a el aquí, en este café me doy cuenta de mi amor por él.

Se caso con una linda chica, la conoció en la facultad de filosofía y letras, su nombre era de origen italiano como el apellido de él, ahora su esposa estaba convertida en una escritora reconocida y directora de un periódico importante, o es lo que yo sabía; así mismo tenía hijos, 2 o 3 pequeños niños, entre ellos había una niña que llevaba mi nombre, nunca supe por que había sido así. El nunca olvido las enseñanzas que pude ofrecerle, de hecho quedo tan dolido que aun casado escribió un poema solo para mi, y ahora que lo encuentro su frialdad me ha hecho recordar los momento en que mi frialdad era parecida.

IV

El tiene 31 años, su edad no la aparenta, tiene el recuerdo en su cara de su 20ena de años.

Aun no lo olvido, pero debo de hacerlo como él lo hizo.

El no dice nada, estoy en el borde de la desesperación y acomodo mis cosas para irme de este lugar, pero el comienza a hablar.

Te espere tanto tiempo, te ame como a nadie, te deje ir esperando volvieras, llore como nunca, pero con el tiempo las letras curaron mi alma; encontré una luz diferente, mi amor en el cual me refugie, pero solo fue una huida para reemplazar tu amor.

Mi hija lleva tu nombre, mi hija está contenta con su nombre, la amo en esa forma, en la que a ti te ame, trato de que sea igual que tú, aun ahora me duele en una forma horrible el que me hayas abandonado. Las adicciones pasaron, pero tu no. Te espere y creí que volverías en cualquier momento, pero no fue así.

Los años pasaron, después en la universidad, ya con todo el estudio que mi mente comprendió y el olvido, todo paso, conocí a ella y me robo esa idea de amar como loco.

Te fuiste y me encontré tan solo como los mares del abismo donde solo me encuentro ahora.

Te amo.

Acto seguido salió del sitio y se alejo con un aire triste, jamás lo volví a ver solo supe que ahora que escribo esto, el deber ser 10 años más joven que yo, pero con una madurez , que ha dejado un legado en poesía moderna, conseguí sus libros y todos llevan esa dedicatoria.

En alguno de ellos, puso la dedicatoria disfrazada que tanto espere:

Dedicado a la mujer que algún día tuve, amante delicada y soñadora múltiple, a Nancy.

Ahora yo tengo casi 70 años, las edades que puse anteriormente fueron en su época, pero hasta ahora me he decidido a publicarlo, ojala lo disfrute. Me case con un tipo que era divorciado, no le encontré sentido y me separe de él, jamás olvido al chico que escribía cosas que sacaba de su mente, a ese chico que se enamoro de la belleza escondida de una mujer que no usaba maquillaje para llamar la atención, jamás lo olvidare.

Por alto esté el cielo en el mundo, por hondo que sea el mar profundo, no habrá una barrera en el mundo que mi amor profundo no rompa por ti.

Recortado de la serie Frank Mont Blanc y las escrituras de su imaginación.